Cuando ves a Superman parar un tren con un supersoplido, piensas ¿y por qué no se ha llevado por delante los árboles y rocas de alrededor? ¿porqué no utiliza su supervelocidad y su superfuerza? Y cuando lo ves sorprendido por el maloso con su kriptonita piensas ¿y por qué no utilizó su visión de rayos x para verlo venir? En fin, que eso de los superpoderes da pie a muchas trampas en los guiones y eso es lo que me pasa con este tipo de novelas “con superpoderes”. Que tienes la sensación de que el guion no es coherente con la propia historia y se utilizan los “fulgores” sólo cuando le interesa al narrador, no cuando correspondería con la lógica subyacente a los fulgores.
En fin, que las novelas de fantasía tienen que ser muy buenas y muy “verosímiles” (coherentes) para que me gusten y ésta no lo es.
Por lo demás, es una novela entretenida, que se deja terminar. No me ha disgustado pero, si no hubiera sido por el club de lectura, creo que habría quedado muy atrás en mi lista de lecturas pendientes.
Saludos,
N.